Para los cagaditos de la cabeza...pero siempre en buena.

Es cierto que el copete y las drogas hacen mal. Pero también es cierto que a nadie le importa esa weá.

El tema con esto es el tipo de persona. O sea, la maldita perso de cada uno y de cómo uno enfrenta el tema de las adicciones (física y psicológicamente). Por eso escogí a la reina del jugo; la más pastelaza de todas: la Gran Courtney Love (Cornelia Amor para los amigos). Esta mina lo único bueno que tiene es haberse engrupido de tal forma a Kurt Cobain que logró entrar con todo en su vida, ya que él igual se dejó influenciar por ella y la tenía bien considerada. Por alguna razón se casó con ella. O a lo mejor, estaba más cagado de la cabeza que ella. Pero algo tenía la curaita esta.

La cuestión es que eso de quedar tan mal o drogarse a morir no va conmigo. Me ha pasado y lo he hecho de buena gana también, pero nunca he dado un jugo en mi vida. ¿y por qué? porque mi forma de ver las cosas es diferente. Mi personalidad es piola y por lo mismo, la cosa me afecta pero no para andar haciendo weas cuáticas de las que muchos me puedan criticar. Por eso, cuando estas cosas pasan, pienso que es una forma inconciente de llamar la atención. Por lo mismo, después no se pueden andar quejando que andan en boca de todos...Y eso yo lo tengo claro aunque me cure raja o wherever. Por eso no lo practico mucho.

Mejor quedar muerto y chao. Nadie te vio, nadie habló de ti. Así que eso es para que lo piensen. Mi protesta no es el tomar a destajo, sino que hacer shows que cagan el carrete o simplemente terminan por aburrir a los amigos. Porque si nadie te pesca o te crees la raja a morir y todos te encuentran una peste, mejor empieza por quedar menos raja y tratar de mantener a los amigos.

AHÍ SE VEN COPANITOS

PD: Esto no tiene nada que ver con mi gran amigo y pololo vitalicio Yoyo. Hay otros peores que aún no encuentran la luz al final del tunel.

Uno de los tantos...

Ha sido realmente excelente re encontrarme con mis amiguis de la pega. Aunque con algunos siempre me encuentro en uno de los bares más top de maipú (uds. saben a cual me refiero), se me había olvidado lo divertido y desestresante que es juntarse después de las miles horas infernales de trabajo.

Esta foto lo demuestra. Aquí estoy en una de las tantas despedidas, aunque esta vez el despedido se va a echar mucho de menos. De todos modos, es el hijo ilustre del Graffiti y no va a faltar la oportunidad de tomarse unas ricas pilsen ahí.

En esta oportunidad estoy con mis yuntas maipucinos Manquepi y Aravena (el de amarillo ya no lo tendremos más revoloteando por los pasillos de la ofice), pero falta uno: Mi gran amigo Chávez (pececillo, Chavón) no sé por qué no andaba haciendo conejitos detrás de la cabeza como es de costumbre en ese momento. Con ellos tengo demasiada buena onda y son mis partners de carrete, de secretear, de alegar, de hablar, de todo....los quiero mucho a los tres.

Ese día carreteamos un día Juves, lo pasamos la raja y al otro día pal copi todos por igual.

Más adelante me tomaré una foto con mis amiguis mujers, ya que también es necesario hablar de ellas: aunque realizamos más actividades de consumismo, de vitrineo y de pisco sour. Osea, más actividades de niñas. Pero igual de entretenidas. Así que por el momento quedémosnos con esta foto que refleja la pura amistad y el prendimiento masivo del que uno es víctima los jueves y viernes por la noche.

AHÍ SE VEN.

Pasando de lo pasivo a la locura

Estas 2 últimas semanas han sido muy movidas en cuanto a la vida laboral: Volví de nuevo a mi antigua pega - Grey. Eso significa que el stress y la locura ya está empezando a apoderarse de mi.

Por lo mismo, he tratado de que no sea así buscando diversos métodos de relajación y de evasión a los problemas: Por ejemplo, carretear un día Juves y olvidarse de todo, pasarla bien. Otra sería, en el mismísimo epicentro de la locura, tratar de mantener la comunicación con mis amigos tratando de cumplir con el trabajo al mismo tiempo que conversamos y planeamos weas divertidas que ayuden a la evasión de tan tensa pega. También, carretear en la pega después que los peso pesados se van. Tomarse su chelita mientras terminas tus labores y dejar las cosas listas para el otro día.

Por eso, me niego a caer en dicho sistema que te manda derechito a ser víctima del colon irritable. Hasta el momento ha resultado, ya que la primera vez que trabajé ahí, hasta soñaba con las weás que tenía pendientes para el otro día. Horror!!. Y no soy la única. Muchos casos así existen y conviven conmigo todas las semanas.

Así que espero poder ganar esta vez la intensa batalla contra la presión, para poder vivir tranquila y serena (por lo menos un poco), sin andar de malas o puteando a todo el mundo. Tratar de encontrar a mi YO positivo, como mucha gente amable y simpática me lo ha sugerido (la verdad es que me cuesta creer que personas así existan en este mundo cruel) y olvidarse de lo laboral cuando se cruza por el umbral de la puerta de tu casa. Por eso, en los carretes, debería prohibirse hablar de lo mismo, aunque igual ayuda a la terapia de grupo algunas veces: botas todo lo que tienes adentro, puteas a tu jefe, te ríes de él y lo tratas como weón. Si. Eso también resulta. Como la risita de NELSON.

Ahí se ven!!!